¿Cómo cuido mis joyas de Acero Blanco?

Las joyas de “Acero” Blanco tienen vida útil, es decir, que con el uso y el paso del tiempo tienden a perder el color. Dejando aparecer tonos amarillentos y cobrizos.

Quizás te preguntes si existe alguna forma especial para cuidarlas y mantenerlas. ¡Y sí, la hay! Pero antes de contarte nuestras recomendaciones, queremos aconsejarte (lo mismo que con cualquiera de nuestras joyas): Disfrutá y usalas sin preocuparte. ¡No te olvides que todo lo que te compres o te regalen de Fina está pensado para que se luczca, y para usarse y exprimirse al máximo!

Somos conscientes y realistas. Si querés que tus joyas de Acero Blanco duren más tenes que cuidarlas un poquito y prestarle más atención que a las joyas de plata ó acero quirúrgico. ¡Y ahora viene la parte aburrida! Nuestros 4 trucos para que sigan luciendo bien el mayor tiempo posible: 

– No mojarlo (al bañarse o meterse al mar)

– No exponerlo a productos (cremas, maquillaje, perfume)

– No lo uses cuando hagas ejercicio, la transpiración y el roce pueden acelerar la pérdida del baño de níquel.

– Guardarlo en un lugar sin humedad en lo posible en un envase cerrado. Podés usar los sobrecitos que recibiste cuando lo compraste, siempre todas las piezas por separado, así también evitas rayones.

De igual manera siendo cuidadosos pierde su tono tan atractivo.

Debemos tener en cuenta que las joyas son elementos que siempre tenemos puestos. Están expuestas a nuestros movimientos, a algún que otro roce, al aire, a la humedad, a la transpiracion…¡La lista es interminable! E incluso, también el PH de nuestra piel puede hacer que el desgaste de la joya sea mayor.

Considerando todas estas cositas, tendríamos que decirte que no las saques de la caja para mantenerlas siempre como el primer día. Pero esa no es la idea, así que…¡¡¡DISFRUTALAS!!!

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